MESA DE FE: ¡OH, NAZARET!
Mayo 5, 2020

Matutina: Mateo 2:23
Meridiana: Salmo 30
Vespertina: Juan 1:46 En tiempos remotos era conocida como aldea o pueblo que carecía de reputación, pues de allí nunca había surgido héroe que hiciera historia, ni prócer de nombradía. Sin embargo, como hecho misterioso de la vida, aquella pequeña aldea fue privilegiado escenario de la vida más extraordinaria y sublime que haya pisado la tierra. Allí José y María, obligados por las circunstancias fueron a radicar, y llevaban en sus brazos la criatura que será reconocida en la tierra como “Jesús Nazareno y Salvador de los hombres”. Los individuos que en un tiempo pensaban que en Nazaret no había nada bueno, tuvieron que cambiar de opinión, pues Nazaret se convirtió en lugar histórico desde donde rayos de luz divina se proyectaron por primera vez sobre todos los ámbitos del mundo.
Cuando los monumentos gigantes de vanidad se derrumban, y los “rascacielos” de soberbia se desplomen de una vez y para siempre del corazón de los humanos, y la vida del hombre se torne hospitalaria y humilde, sólo entonces tendremos la dicha de disfrutar del honor y la gloria de ver a Jesús de Nazaret como divino guiador de nuestra existencia. ¡Oh, Nazaret!
-Luis Cruz Lara
¡Así son las cosas de Dios! ¡El lugar humilde y despreciado, tornado en lugar de misteriosa atracción y renombre universal!
#LuisCruz
Matutina: Mateo 2:23
23Y vino, y habitó en la ciudad que se llama Nazaret: para que se cumpliese lo que fué dicho por los profetas, que había de ser llamado Nazareno.
SALMO 30
Salmo cantado en la dedicación de la Casa:
GLORIFICARTE he, oh Jehová; porque me has ensalzado, Y no hiciste á mis enemigos alegrarse de mí. 2 Jehová Dios mío, A ti clamé, y me sanaste. 3 Oh Jehová, hiciste subir mi alma del sepulcro; Dísteme vida, para que no descendiese á la sepultura. 4 Cantad á Jehová, vosotros sus santos, Y celebrad la memoria de su santidad. 5 Porque un momento será su furor; Mas en su voluntad está la vida: Por la tarde durará el lloró, Y á la mañana vendrá la alegría. 6 Y dije yo en mi prosperidad: No seré jamás conmovido; 7 Porque tú, Jehová, por tu benevolencia has asentado mi monte con fortaleza. Escondiste tu rostro, fuí conturbado. 8 A ti, oh Jehová, clamaré; Y al Señor suplicaré. 9 ¿Qué provecho hay en mi muerte, cuando yo descienda al hoyo? ¿Te alabará el polvo? ¿anunciará tu verdad? 10 Oye, oh Jehová, y ten misericordia de mí: Jehová, sé tú mi ayudador. 11 Has tornado mi endecha en baile; Desataste mi saco, y ceñísteme de alegría. 12 Por tanto á ti cantaré, gloria mía, y no estaré callado. Jehová Dios mío, te alabaré para siempre.
Vespertina: Juan 1:46
46Y díjole Natanael: ¿De Nazaret puede haber algo de bueno? Dícele Felipe: Ven y ve.
CONTENIDO ADICIONAL:
AÑO BÍBLICO, GUÍA DE ORACIÓN Y ACTIVIDADES
AÑO BÍBLICO:
Esdras: 9 10
Nehemías: 1
GUÍA DE ORACIÓN
Cadena de Oración por País y Localidad:
E.U. Diócesis Sur-Orlando
Costa Rica-Liberia
ACTIVIDADES:
Cuba Encuentro de nuevos creyentes. Zona Centro Occidental
Ministerio de Crecimiento Espiritual Semana de actividades
SALMO DEL MES:
SALMO 30
Salmo cantado en la dedicación de la Casa:
1 GLORIFICARTE he, oh Jehová; porque me has ensalzado, Y no hiciste á mis enemigos alegrarse de mí.
2 Jehová Dios mío, A ti clamé, y me sanaste.
3 Oh Jehová, hiciste subir mi alma del sepulcro; Dísteme vida, para que no descendiese á la sepultura.
4 Cantad á Jehová, vosotros sus santos, Y celebrad la memoria de su santidad.
5 Porque un momento será su furor; Mas en su voluntad está la vida: Por la tarde durará el lloró, Y á la mañana vendrá la alegría.
6 Y dije yo en mi prosperidad: No seré jamás conmovido;
7 Porque tú, Jehová, por tu benevolencia has asentado mi monte con fortaleza. Escondiste tu rostro, fuí conturbado.
8 A ti, oh Jehová, clamaré; Y al Señor suplicaré.
9 ¿Qué provecho hay en mi muerte, cuando yo descienda al hoyo? ¿Te alabará el polvo? ¿anunciará tu verdad?
10 Oye, oh Jehová, y ten misericordia de mí: Jehová, sé tú mi ayudador.
11 Has tornado mi endecha en baile; Desataste mi saco, y ceñísteme de alegría.
12 Por tanto á ti cantaré, gloria mía, y no estaré callado. Jehová Dios mío, te alabaré para siempre.