MESA DE FE: EL DESAFÍO APOSTÓLICO
Mayo 14, 2020

Matutina: Romanos 8:37-39
Meridiana: Salmo 30
Vespertina: Romanos 8:35 Quién nos apartará del amor de Cristo. “¿Tribulación?” Nos hemos familiarizado con las tribulaciones; y, además, dice la Palabra que “por muchas de ellas entraremos en el reino de los cielos”. “¿Angustia?” No nos hablen de angustias, pues, al respecto, el cristiano puede decir la última palabra. “¿Persecución?” Hablarle de persecuciones a los cristianos es como poner en el tocadiscos una grabación rayada, la cual saben de memoria. No estamos ajenos del cumplimiento de las Sagradas Escrituras. “¿Hambre?” En cuanto a esto tenemos historia, pues Cristo ayunó “cuarenta días y cuarenta noches”. Las grandes obras de la vida espiritual se han hecho con el estómago vacío. ¿Se asombra? Algunos se han acercado a la mesa a la hora de cenar, y lo que han tenido delante ha sido tan sólo una jarra con agua. Por eso Pablo en su desafío, dice: “¿Hambre?” Porque en eso los cristianos son campeones.
“¿Desnudez?” Los cristianos antiguos usaron como vestuario “pieles de ovejas y de cabras”. El vestido de Juan el Bautista “era de pelos de camello”. Por tanto, no tenemos vanidad en cuanto al vestuario y si las circunstancias nos obligan, acudimos al antiguo traje. Concluimos, pues, con las palabras: “Por lo cual estoy cierto que ni la muerte, ni la vida, ni ángeles, ni principados, ni potestades, ni lo presente, ni lo porvenir, ni lo alto, ni lo bajo, ni ninguna criatura nos podrá apartar del amor de Dios que es en Cristo Jesús, señor nuestro”. Amén.
-Luis Cruz Lara
Los grandes hombres de Dios se han sostenido como viendo al Invisible
#LuisCruz
Matutina: Romanos 8:37-39
37Antes, en todas estas cosas hacemos más que vencer por medio de aquel que nos amó.
38Por lo cual estoy cierto que ni la muerte, ni la vida, ni ángeles, ni principados, ni potestades, ni lo presente, ni lo por venir,
39Ni lo alto, ni lo bajo, ni ninguna criatura nos podrá apartar del amor de Dios, que es en Cristo Jesús Señor nuestro.
SALMO 30
Salmo cantado en la dedicación de la Casa:
GLORIFICARTE he, oh Jehová; porque me has ensalzado, Y no hiciste á mis enemigos alegrarse de mí. 2 Jehová Dios mío, A ti clamé, y me sanaste. 3 Oh Jehová, hiciste subir mi alma del sepulcro; Dísteme vida, para que no descendiese á la sepultura. 4 Cantad á Jehová, vosotros sus santos, Y celebrad la memoria de su santidad. 5 Porque un momento será su furor; Mas en su voluntad está la vida: Por la tarde durará el lloró, Y á la mañana vendrá la alegría. 6 Y dije yo en mi prosperidad: No seré jamás conmovido; 7 Porque tú, Jehová, por tu benevolencia has asentado mi monte con fortaleza. Escondiste tu rostro, fuí conturbado. 8 A ti, oh Jehová, clamaré; Y al Señor suplicaré. 9 ¿Qué provecho hay en mi muerte, cuando yo descienda al hoyo? ¿Te alabará el polvo? ¿anunciará tu verdad? 10 Oye, oh Jehová, y ten misericordia de mí: Jehová, sé tú mi ayudador. 11 Has tornado mi endecha en baile; Desataste mi saco, y ceñísteme de alegría. 12 Por tanto á ti cantaré, gloria mía, y no estaré callado. Jehová Dios mío, te alabaré para siempre.
Vespertina: Romanos 8:35
35¿Quién nos apartará del amor de Cristo? tribulación? ó angustia? ó persecución? ó hambre? ó desnudez? ó peligro? ó cuchillo?
CONTENIDO ADICIONAL:
AÑO BÍBLICO, GUÍA DE ORACIÓN Y ACTIVIDADES
AÑO BÍBLICO:
Job: 5 6 7
GUÍA DE ORACIÓN
Cadena de Oración por País y Localidad:
Costa Rica-Tucurrique
España-La Línea De La Concepción
ACTIVIDADES:
SALMO DEL MES:
SALMO 30
Salmo cantado en la dedicación de la Casa:
1 GLORIFICARTE he, oh Jehová; porque me has ensalzado, Y no hiciste á mis enemigos alegrarse de mí.
2 Jehová Dios mío, A ti clamé, y me sanaste.
3 Oh Jehová, hiciste subir mi alma del sepulcro; Dísteme vida, para que no descendiese á la sepultura.
4 Cantad á Jehová, vosotros sus santos, Y celebrad la memoria de su santidad.
5 Porque un momento será su furor; Mas en su voluntad está la vida: Por la tarde durará el lloró, Y á la mañana vendrá la alegría.
6 Y dije yo en mi prosperidad: No seré jamás conmovido;
7 Porque tú, Jehová, por tu benevolencia has asentado mi monte con fortaleza. Escondiste tu rostro, fuí conturbado.
8 A ti, oh Jehová, clamaré; Y al Señor suplicaré.
9 ¿Qué provecho hay en mi muerte, cuando yo descienda al hoyo? ¿Te alabará el polvo? ¿anunciará tu verdad?
10 Oye, oh Jehová, y ten misericordia de mí: Jehová, sé tú mi ayudador.
11 Has tornado mi endecha en baile; Desataste mi saco, y ceñísteme de alegría.
12 Por tanto á ti cantaré, gloria mía, y no estaré callado. Jehová Dios mío, te alabaré para siempre.